Estando en casa alrededor de la cocina, hablábamos sobre la excursión que Hugo, el hermano mayor del trío calavera iba a realizar dentro de unos días a Granada.
Le comentaba a Leo, el segundo de los hermanos empezando por arriba o por abajo, que el primer día irían a la nieve y el segundo al Parque de las Ciencias.
–Pero mamá ¿ al Parque de las Ciencias van a aprender o a divertirse?
El señor nudista y yo nos miramos como diciendo sin decir.
Para él, y para muchos alumnos, o se aprende o se divierten.
No hay más.
Ambas cosas, no.
Es como dormir o estar despierto, no puedes dormir si estás despierto. Obvio.
Pues igual de obvio de lo aprender o divertirse.
A ver, que tú y yo sabemos que aprender y divertirse pueden ir de la mano.
Pero lo que opinemos nosotros a veces es indiferente, lo que importa es lo que opinen ellos. Lo que le transmitimos.
Le comenté que su hermano en el Parque de las Ciencias haría las dos cosas, divertirse y aprender.
Pero por si no nos había quedado claro puntualizó:
–Hombre, es que en el cole es todo lo contrario.
Para él en el cole se aprende pero de forma aburrida.
Me hizo pensar y me dio pena al mismo tiempo.
Tiene tan asociado el aburrimiento al colegio que es complicado hacerles ver que hay otras maneras de aprender en las que ellos son los verdaderos protagonistas y en la que el aburrimiento no entra en juego en esa ecuación.
Está claro que no tiene porque ser así, que ese tandem cole-aprendizaje-aburrimiento puede diluirse y convertirse en cole-aprendizaje-diversión.
Existen muchas formas de hacerlo.
Pero una de ellas que funciona extraordinariamente bien, es la puesta en marcha del método de los 11+1 pasos.
A mi me lleva funcionando años (años). Aunque eso no es garantía de que te vaya a funcionar a ti. Solo digo que a mi (y a otros nudistas) me lleva funcionando años y con grupos muy diversos.
Fíjate.
El otro día, para comenzar el trimestre, al grupo en el que doy ciencias les volví a preguntar que cómo querían dar el tema de la forma tracional o con el método. Y hubo 22 votos a favor del método, 1 abstención y 0 (cero) votos en contra.
Un 95,6% de votos a favor.
Puede que ese 95,6% de votos a favor del alumnado se deba a los diferentes juegos que hay a lo largo de los 11+1 pasos.
O quizás puede que ese 95,6% de votos a favor se diera porque al final todos alcanzan su aprobado.
O quizás ese 95,6% se deba a que se sienten que pintan algo en el proceso.
O tal vez ese 95,6% pueda deberse a que le quieren hacer la pelota a la maestra.
Yo qué sé.
Lo único que sé es que algunos padres y madres (no todos, ehh) de la clase donde imparto ciencias, me han preguntado
–¿qué estás haciendo en ciencias que está mi hijo que solo quiere estudiar ciencias?
A me veces me sale decirle, para descubrirlo apúntate aquí (jajajaja):